Prevenir el radón desde las aulas

Sin pretenderlo, la Facultade de Socioloxía ha estado en boca de todos esta semana por los presumibles altos índices de radón, un gas causante de cáncer de pulmón. Desde la propia Universidade da Coruña han restado importancia apelando a los múltiples controles y mediciones en un escenario especialmente sensible con este gas, un peligro silencioso en buena parte de Galicia por su base granítica (el radón nace de la descomposición del propio granito en el subsuelo). De este modo, una empresa domiciliada en Bergondo ha iniciado un proyecto para incorporar el radón al conocimiento común a través de las escuelas. Con un equipo de físicos prevé entrar en las aulas para dar charlas sobre este elemento, su presencia y su modo de eliminación. «Queremos que los estudiantes conozcan este gas tan frecuente bajo nuestros pies pero, al mismo tiempo, que compartan esa información con sus padres, que son lo que pueden tomar medidas si consideran que podrían estar en situación de riesgo», explica Javier Longueira, gerente de Inteko, una firma que ha desarrollado estudios «avalados por la Facultad de Física y el Departamento de Análisis Radiológicos de Galicia y la Politécnica de Ferrol».

Arteixo y Culleredo

Si bien el radón es común en toda la comarca, la puerta de entrada escogida para este proyecto divulgativo en los colegios e institutos está en los ayuntamientos de Arteixo y Culleredo, donde la presencia del radón es mayor. «Nos hemos reunido con responsables municipales de ambos concellos, que nos harán de puente con los colegios». Y el próximo martes ya tienen cita con otro centro de A Coruña. «Solo queremos ocupar el lugar del profesor una o dos horas para instruir a los chicos y chicas sobre la importancia del radón, que cale en ellos para siempre este riesgo potencial y lo tengan en cuenta cuando les toque elegir su vivienda en el futuro, que sepan que para un puesto de trabajo puede bastar con airear los edificios, pero que en cambio hay que buscar soluciones en los hogares si se constata la presencia de radón porque se respira de noche, se cuela por fisuras que alcanzan conductos de fontanería o similares», relata Longueira. «En la Ruta de la Plata se han observado grandes concentraciones de radón, también en los Pirineos… y en nuestro entorno ahí está A Zapateira, pero en general es muy común en toda Galicia».

Longueira considera que este es el momento idóneo para introducir el radón en las aulas -«desde el punto de vista teórico»-, ya que en pocos meses verá la luz la ley que regula la presencia de este gas en los puestos de trabajo.

Fuente La Voz de Galicia